Chaqueta gafada en buena compañía

Amigas que te traen pan de molde casero, mermelada de naranja artesana, una revista ottobre de mujer, ingredientes para una masa perfecta... No tiene precio! Me da vértigo pensar qué hubiera sido de mi vida sin conoceros... Os adoro, lo sabéis? y si no lo sabíais, ya lo sabéis... Gracias por hacerme sentir especial, por liberar mi mente, por regalarme unos de los días más divertidos en los últimos tiempos... Y por aceptarme TAL COMO SOY.

En el post de hoy os enseño la chaqueta más gafada del mundo, pero que oye, que ahora me pongo cada día, porque la he hecho yo, porque es igual que la de mi hijo y porque me ha costado horrores acabarla... (desde el otoño pasado está rondando mi mesa de trabajo).

 

Es mas bien un cortavientos que no una chaqueta, es finita, con un pelo negro interior. El patrón, no me preguntéis por él, quemado está o en lo mas fondo del mar.  Además le he hecho tantas modificaciones que no tiene nada que ver con el patrón original.

Primero me quedaron las mangas estrechas que ni me podía mover (le añadí una pieza en la sisa), me quedaba ancha de la espalda (le hice una costura vertical en el centro de la espalda), le puse bolsillos en las costuras laterales que me quedaron fatal (se los quité y añadí otros super puestos) y el cuello... después de meditarlo varios meses, una tira y a correr que quiero acabarla ya!

Detalles de un... (sin palabras) jijiji

Oh, los snaps! Se me olvidaba... los puse de noche pensando que eran granates y eran lilas :)))) total que es desastrosa, pero me mola.

Que os ha parecido? las que la han visto de cerca me han dicho que las pifias no se ven, así que me la voy a poner toda la primavera! Y que mejor que estrenarla con buena compañía: Mis locas!

Después de un día genial, resaca de risas y de locuras varias, te levantas con una sonrisa en la boca que se desvanece de repente mientras desayunas a su salud un pan con mermelada de naranjas con jenjibre deliciosa.

Fotografía: Senyoreta Pots 

Gracias a todos los que visitáis mi rincón, rumseamos?

Besotes